martes, 23 de noviembre de 2010

Natalia no come vidrio

Salimos a caminar por el parque y encuentro un charco de vidrios rotos. Me pongo a mover recordando a un japonés que hizo una obra de una hora sobre vidrio. Cómo se enseña la composición? a hacer una obra? que és un Laboratorio de movimiento?. Tener herramientas para hacer arrancar la maquinaria te lleva años pero creo que nos falta una cuota de sinceridad a la hora de decir que con eso no alcanza, el tema no es sumar recursos y técnicas sino desarrollar una visión de totalidad que coloca a la danza en una relación dinámica con otros mundos e ideas. Se trata de que la búsqueda no sea sólo formal sino también conceptual. La pregunta es: ¿de cuántas maneras puedo desarrollar esa experiencia?

4 comentarios:

Eva dijo...

El desafío es aprovechar la técnica adquirida para poder integrar los mundos que nos salen al encuentro. A mí los mejores poemas se me ocurrieron caminando, no encerrada en mi casa ni en una biblioteca, aunque en mi casa haya leido y escrito lo suficiente como para poder llegar a escribir esos poemas.

Natalia Martirena dijo...

algo parecido me pasa , todo sucede in situ probando, ensayando pero despues me doy cuenta que lo almacenado fue lo que me hace elegir ir por ahi y no por otro lado.

Anónimo dijo...

Que bueno, como disfrutas de ese momento... contagias optimismo y felicidad!
Cariños!

Natalia Martirena dijo...

Pensaba que loco, optimismo arriba de vidrios chocados, sobre algo que seguro no fue muy feliz estoy yo contenta. Me acuerdo de un entrevista de Josph Nadjt un coreografo que le gusta ir a su casa a yugoslavia a ver como todo cosa es reemplazada por otra, en una grieta crece una planta, en una ventana vacia se llena de tierra y pasto. La ley de la vida